Reflexiones
¡Feliz navidad!

¡Feliz navidad!

Mucho ya se ha hablado sobre la navidad. Hoy no vamos a discutir sobre como el mundo cristiano festeja este día, sino más bien me gustaria reflexionar sobre qué significa la navidad en estos tiempos modernos.

No es facil justamente en fecha tan cercana, no mencionar lo vivido en nuestro país con el campeonato mundial obtenido por nuestra selección nacional. Este fenómeno cultural que ha vivido nuestro país nos muestra lo importante que es el sentido de pertenencia. He visto muchos videos sobre como el mundo trata de explicar este fenómeno y como algunos argentinos tratan de explicar lo vivido. Especialmente me llamó la atención de una frase muy mencionada que dice: “Si no sos argentino no lo vas a entender” Porque explicar la euforia de millones de argentinos que se acercaron a ver a sus campeones es muy dificil si no se vive aquí. ¿Como es posible que los sentimientos esten a flor de piel solo por ver campeones a un grupo de hombres que corren detrás de una pelota? Si la realidad, como muchos dicen, no va a cambiar. Los problemas siguen, las deudas continuan, hay que seguir trabajando y muchas otras cosas más. La única explicación posible es el sentimiento de pertenencia. La camiseta, los colores, el sentimiento de pertenecer a un grupo son algunos elementos que marcan a los fanaticos del fútbol.

Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.

San Mateo

6:21

Y ahora yo me pregunto: ¿Sentimos lo mimo cuando se trata de nuestro Señor y Salvador? ¿Estariamos dispuestos a salir a la calle a gritar por lo que se logró?

La navidad es una fiesta porque recordamos que hace más de dos mil años, el Dios del cielo y la tierra se digno a bajar de su lugar para convertirse en uno de nosotros y tomar nuestro lugar, el lugar del condenado, ya que gracias a su muerte nosotros hoy tenemos vida eterna. Y no es una vida eterna en este mundo lleno de violencia y maldad, sino que como dice el verso de 2 Pedro 3:13:

“Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia.”

Así es mi querido amigo, la navidad nos transporta a la promesa más grande realizada por nuestro Señor Jesucristo como está escrito en San Juan 14:2:

En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.”

Que esta navidad nos llene de alegria al saber que si Dios cumplió su promesa de que vendria a la tierra a morir por nosotros, cuanto más cumplira pronto su promesa de que vendra por segunda vez como esta escrito en el libro de Hebreos 9:28:

“así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan.”